Autora: Dr. Moisés Salinas Fleitman, Rector de la Universidad ORT México
La Responsabilidad Social es un concepto amplio que no se limita al tema empresarial y existe a niveles personal, organizacional y político. Es el entendimiento y la acción de que nuestras actividades tienen impacto positivo y negativo en la sociedad.
Tiene tres componentes: el cognitivo, que se refiere al conocimiento de cuáles son los efectos que tienen nuestras acciones en temas de derechos humanos, de medio ambiente, de acceso a la justicia o de desarrollo económico. El segundo es el afectivo, son las actitudes que tenemos frente al hecho de que nuestras acciones pueden tener efectos negativos y positivos, porque al estar conscientes de las posibles condiciones desfavorables para los demás, conlleva a la responsabilidad de trabajar para minimizar tales efectos y, que si es el caso contrario donde los efectos son positivos, se busca replicar y promover. Y el tercero es el conductual, que se refiere a cómo hacer que nuestras acciones sean responsables y minimizar los efectos negativos o replicar y promover los positivos.
En la Universidad ORT México, que surgió con una identidad de responsabilidad, emprendimiento y liderazgo sociales, nos enfocamos en enseñar a nuestros estudiantes qué efectos tienen las acciones en la sociedad, la actitud frente a dichos efectos y cómo lograr efectos positivos o disminuir los negativos, en todos los niveles tanto personal, organizacional y el político, y llevarlos a que sus esfuerzos no sean en vano sino que tengan resultados satisfactorios en sus organizaciones o proyectos sociales.
Esta importante labor de la Universidad ORT México y de otras instituciones de educación superior debe ser un esfuerzo sistémico donde todos estemos conscientes de lo que estamos haciendo y todos trabajemos en conjunto y en redes para ser una diferencia en la transformación positiva de nuestra sociedad.
Las universidades no son empresas, sino un agente transformador de la sociedad
En las últimas décadas se ha generando un paradigma muy dañino para la educación superior que ve al estudiante como cliente y que implica considerar a las universidades como empresas o cualquier negocio cuyo propósito es generar valor. Esta es una de las razones por la que en la Universidad ORT México rechazamos de manera muy contundente la educación con fines de lucro. Las universidades no son empresas y la educación no es un servicio al cliente, si fuera así, entonces tendríamos que adaptarnos a las necesidades o decisiones de los clientes para generar valor y lograr su satisfacción. El objetivo de las universidades no es tener clientes satisfechos sino personas críticas.
Desde esta perspectiva, la educación superior privada con enfoque en sociedad civil, no es una empresa que genera valor, es una organización social que genera impacto ligado a los objetivos de desarrollo sustentable 2030 que forma agentes de cambio en lugar de clientes satisfechos.
En la Universidad ORT México los estudiantes no vienen a recibir un servicio por el que pueden estar satisfechos, vienen a recibir una formación que les va a dar las herramientas para salir y tener la responsabilidad de usarlas para lograr una sociedad mejor y más justa.